ALFREDO GÓMEZ CERDÁ
Amalia es una bruja que vive en Urbecualquiera e invita a sus dos amigas, Amelia y Emilia, a pasar una temporada en su casa. A las tres les encanta pasear por el bosque de Cantamilanos, donde pueden recoger todo lo que necesitan para sus pócimas. Pero la ciudad crece y la junta municipal quiere talar el bosque y construir allí chalets. Cuando las brujas se enteran, intentan hacer todo lo posible para evitarlo utilizando sus poderes. Sus planes fracasan. Entonces, deciden disfrazarse de árboles y hacer frente a las máquinas cuando lleguen. Pero las máquinas no aparecen, ya que empieza a llover. Las brujas, empapadas, cogen una gripe tremenda. Al recuperarse, se encuentran con que todos los habitantes de la ciudad se han disfrazado de árboles para salvar el bosque de Cantamilanos. El alcalde comprende, al fin, que lo que iba a hacer no está bien y decide no construir la urbanización. Las brujas se ponen muy contentas: ya vuelven a respirar tranquilas.