MIGUEL ÁNGEL MOLEÓN VIANA
En el lejano país de Avalón, el rey Arturo ha cumplido doscientos cincuenta años, y siente que se merece un descanso. Sin embargo, cuando está a punto de dormir una siesta junto al calor del hogar, se le aparece un geniecillo del fuego que va a truncar sus planes. Así que el rey Arturo emprende una nueva aventura: irá al lejano castillo de Irás y No Volverás para encontrar el caldero mágico de Quimpercorentín. Este tiene poder para que se cumpla el más íntimo deseo del rey y de quienes lo acompañen. Pero Arturo no va solo: le acompañan el genio del fuego, el mago Merlín y Dindondel, el bufón. En el camino lleno de peripecias, de encuentros con druidesas, con horribles y famélicos trasgos y con la temible bruja Viviana, se encuentra a Carmina, una valiente jovencita que se conviertte en "caballero" y es la encargada de portar a Excalibur, la famosa espada del rey. Por último, se agregan los caballeros de la Mesa Redonda -los Hombres del Musgo), un fauno, un gigante y un ejército de enanos. Así, aunque más viejo y con dolor de juanetes, Arturo consigue llegar junto con sus compañeros al castillo de Irás y No Volverás. Allí vence a Viviana y sus fuerzas del mal en la batalla de los Páramos Pavorosos, y al nigromante Brumante Tanabrús. El caldero, finalmente, hace que se cumpla el deseo más profundo del rey: recuperar su viejo caballito de cartón. Asimismo, cada uno de los acompañantes ve realizados sus deseos.